Bendito Mc'Donalls

Fue un 17.

Ayer, se cumplieron 2 años desde que comenzamos esto de nuevo.

¿Recordará ese día?


Acompañados de una hamburguesa y bebida con un metro zumbando a nuestro lado, me atreví a acompañarlo tomando su mano, aferrándome a ella hasta el día de hoy. Me atreví, como a tantas otras cosas a su lado, ya que en sus brazos me atrevo a todo.

Desde ese día de abril, soy otra,
por una infinidad de cosas.

Antes de ese día era la mujer más entumecida,
que tiritaba con el viento y con el sol, que caía sin fin,
como en las pesadillas.

Pero él me albergó en su cuerpo
cubriéndome toda para que dejara de tiritar
y volviera a respirar del sol y del viento.

Sus brazos, que me esconden del mundo
cuando quiero hacerlo,
que me miman y consienten regalonamente,
que me calman cuando creo volver a tiritar;
mi lugar preferido.


Ya dos otoños han cuidado de nuestros días,
otoño y primavera, mis estaciones preferidas.
Quisiera estar todos los otoños cayendo en sus brazos
como lo hacen las hojas que se decoloran,
y floreciendo en primavera como lo hago cada vez en su boca.


Ese día, en el que un beso fue la partida de esto.

No quiero soltar su mano,

ni por las miles de historias

que ya han pasado bajo nuestros pies,

no quiero.

¿Recordará él ese día?

Amo ese día, como miles otros,

en que me he desarmado de amor por él.