Miro por la ventana. Pasa por la calle un niño con un envase vacío de Coca-Cola.
(pasan unos 5 minutos)
Miro por la ventana. Pasa por la calle el mismo niño en dirección contraria, con un envase de bebida lleno de Coca-Cola. Hay una piedra en su camino. El niño tropieza y plashhh!. La bebida explotó. El niño se levanta con cara afligida, toma la botella semivacía y se apura de regreso a casa para enfrentar un reto.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario